Isaí está sentado en el suelo de una pequeña sala de reunión del Consejo Regional de la Costa Caribe Norte de Nicaragua. Son poco más de las 2:30pm y está concentrado pintando una tortuga mientras a su alrededor una veintena de personas adultas discuten sobre temas de educación. Isaí tiene 8 años, cursa 3er grado de primaria en una escuela en Bilwi, cabecera de la región ubicada a 560 km de distancia de Managua. Isaí está allí acompañando a su mamá.
Al comenzar a hablar con él nos explica que aprendió a dibujar y pintar durante un taller facilitado por la organización FUNARTE en el marco del proyecto TransformARTE que implementa en la Costa Caribe con apoyo técnico y financiero de Save the Children, al que su mamá asistió. “Fui al taller y me incluyeron en el grupo. Como me vieron que no hacía nada y me estaba aburriendo, me dieron qué pintar y con eso ya me animé y me tranquilicé” explica.
Claribel González Pinock su mamá fue invitada a este taller realizado en 2016 porque en ese momento trabajaba como técnica municipal en el Ministerio de Educación. “El taller era sobre pintura, dibujo y elaboración de materiales didácticos para la enseñanza y aprendizaje de niñas y niños. Yo me llevé a Isaí porque no tenía con quien dejarlo en casa” comenta, igual que sucede hoy, que le acompaña. Ambos viven junto al hermano mayor de Isaí, de 13 años, en una casa en el barrio de Waulalaya, así que en muchas ocasiones Isaí acompaña a su mamá a actividades. “Nada más era yo” comenta Isaí haciendo referencia a que no había niñas y niños en el taller, “mi mamá no tenía con quién dejarme en la casa, mi hermano estaba en clase. En ese tiempo yo no estudiaba” explica.
Esta experiencia con el arte y la pintura fue completamente transformadora para Isaí. Él mismo nos lo relata consciente del reto que fue en su momento durante aquel taller un año atrás. “Yo pinté y pinté hasta que llegó la hora de exponer, no sabía que yo iba exponer y cuando lo hice les di gracias a FUNARTE y a mi mamá, siempre voy a recordar todo eso”. Claribel nos explica que ese día a Isaí le tocó trabajar en un grupo distinto del de ella, y con orgullo comenta que desarrolló un material didáctico para la enseñanza y aprendizaje de las matemáticas. “Isaí hizo materiales didácticos para enseñar a contar sobre tapas de refresco. Él tiene problemas de la vista y en ese momento explicó la razón: “esto me sirve porque no puedo ver largo pero sí puedo tocar”. Siempre piensa en él y lo aplica” concluye emocionada.
“Si uno no puede contar porque es ciego se puede hacer con tapitas. Con una tapita es 1, con dos tapitas, ya sabe que son 2, y así se puede ir aprendiendo, cómo eso se suma, se resta. Las tapas son para niños especiales” explica serio Isaí al preguntarle sobre las cosas que hicieron en el taller y continua hablando, “aprendimos a pintar con carbón, fresquitop (un polvo dulce de diferentes sabores), con agua y algodón. Yo pinté una gran tortuga como ahora, estaba inspirado en el mar” revela y nos cuenta que cuando se inspira en el mar “siento que algún día voy a salir al mar, porque siempre me ha gustado ver los barcos”. Isaí habla también de que hay alternativas cuando no hay los materiales que queremos para pintar. “Si no tenemos colores, arrancamos una hoja y comenzamos a pintar. Y si no tenemos nada, buscamos piedras y lo pegamos con tape o pega, formando cosas. Con la plastilina también se puede”.
Hoy Claribel está participando en una reunión de preparación para la medición de la calidad de los ambientes de aprendizaje en la Escuela Modelo Marvin Mitchel de Bilwi, siempre en el marco del proyecto TransformARTE, es por eso que llegó al Consejo Regional y que a nuestro lado Isaí vuelva a pintar una tortuga y salude al equipo de FUNARTE con amor, especialmente a Yadira Martinez, quien coordinó el proyecto en los años anteriores. “Yadira fue para mí como una tía. Ella me ha ayudado a no rendirme y salir adelante. Yadira me enseñó a dibujar y pintar” comenta orgulloso y seguido le tomamos una foto con ella.
Aplicando lo aprendido
“Yo aprendí a pintar, no sabía que una puede pintar hasta con las hojas y me gustó mucho” comenta Claribel, quien es docente, y actualmente se desempeña como maestra de educación primaria trabajando en la escuela normal gran ducado de Luxemburgo. “Eso que he aprendido en las capacitaciones con FUNARTE lo implemento en mi aula de clase porque es muy creativo y se saca mucha información del estudiante”. Claribel cuenta que ahora implementa el arte en sus clases de formación docentes “también en la escuela anterior en la que Isaí estudiaba.
“Tras el taller, Isaí se llevó la pintura a casa porque lo quería llevar a su escuela para que sus amigos lo vieran y para que yo le ayudara a pintar” explica Claribel, quien en aquel momento se sintió comprometida y tuvo que hacer el tiempo en su trabajo en el MINED para poder cumplir con la petición de su hijo. “Cuando se lo contaba a mis compañeros de clase les decía que yo exponía y pintaba bonito. Ellos quisieran ir también. Les decía que mi mamá iba a venir a enseñarnos” comenta Isaí, y Claribel lo corrobora. “Él me decía todo los días “Mamá, ¿cuándo me vas a ayudar?” Entonces quedamos un día. Isaí se encargó de que todo estuviera listo cuando yo llegara al aula. Cuando llegué él tenia organizados a todos los niños y los materiales y yo sólo le ayudé”.
Isaí lo tenía claro nada más salir de aquel primer taller. “Cuando salimos quise hacerlo otra vez en mi colegio, en mi colegio nuevo no lo puedo hacer porque no hay tiempo, mi mama me dijo que lo hiciera con mis compañeros, que trajeran los materiales, pero seguro algunos no pueden” Isaí nos cuenta que en este curso ha cambiado de escuela, y que todavía no ha podido aplicar lo aprendido con su mamá y con FUNARTE, pero no se rinde, sabe que conseguirá el momento. “Él quiere que lo haga, pero ahora no tengo tiempo. Tengo que ver mi tiempo” comenta Claribel y nos explica que “lo cambié de escuela porque yo cambié de lugar de trabajo y por la atención que le daban”.
Discapacidad no es limitante
Cuando Isaí tenía 3 años le diagnosticaron una parálisis flácida producto de una fiebre por la que tuvo convulsiones. En aquel momento estuvo 15 días ingresado en el hospital en Managua. Las convulsiones le afectaron el oído y la vista, incluso sus articulaciones. “Al inicio botaba las cosas y no podía agarrar bien, actualmente el flaquea con sus manos” comenta Claribel y explica que en Bilwi no hay especialistas, “por eso tengo que ir a Managua, a los Pipitos, donde me lo atendieron muy bien y visita el otorrino, porque tiene el tímpano movido”. Nos dice que hoy Isaí no lleva sus gafas porque las están reparando. “Con los lentes ha mejorado mucho. Perdió un año de escuela, pero ya va adelantado, porque aprendió con FUNARTE el año pasado”.
“Una madre soltera lucha” asevera Claribel y también hace hincapié en que ha habido cambios en Isaí porque en la nueva escuela se ha destacado ya como mejor estudiante y es consejero. “Él ya no se siente inútil con sus manos, y hasta se le olvidó su discapacidad. Se siente mejor en su escuela, se siente útil y es un líder”.
“Ya sé cómo pintar y puedo exponer mi dibujo, lo que hago. Mi mamá y FUNARTE me enseñaron, desde ahí fui un buen estudiante. Con eso yo voy a poder seguir adelante” dice Isaí contándonos inmediatamente que quiere terminar la educación primaria y secundaria y ojalá ir a Managua a estudiar en la universidad ingeniería industrial a “aprender robótica, computación como mi tío”. Claribel dice que al finalizar la primaria suele decir que quiere estudiar en la Escuela Normal para ser profesor, y después si puede realizar la ingeniería. “Nada más importa que yo aprenda, cunado consiga mi trabajo voy a volver a Bilwi y voy a mantener a mi mamá” añade Isaí.
“Antes a veces por su misma discapacidad tenía una reacción grosera e impulsiva, pero hasta eso cambió. Totalmente le ha cambiado la experiencia, el involucrarlo en pintura, tenerle con una mentalidad muy abierta le ha cambiado. Como mamá me ha ayudado mucho. El sentirse como líder le ha hecho cambiar, ahora es dócil y bien ordenado, está pendiente de su escuela, de su directora, del plan de clase de su maestra, si se le olvida algo se lo dice” explica orgullosa Claribel.
“Soy el mejor estudiante, tuve notas altas, saqué todo 100 y 99 y me nombraron consejero de la escuela” dice serio Isaí. “A los niños chiquitos les enseño lo que no entienden. Ellos me hacen caso cuando les enseño. Les gusta jugar y para que me hagan caso les digo que se pongan a pintar. Les digo que no peleemos con la profe porque ella necesita un descanso también”.
Poesía, su nuevo talento
Isaí confiesa que en los talleres con FUNARTE le encantaba exponer, es así que Claribel se dio cuenta del potencial que tenía declamando. “Para mí tenía problemas de retención” comenta Claribel, “todo se le olvidaba, pero ha roto barreras. Yo descubrí su talento de poseía porque expone muy bien”. Isaí comenta su experiencia con orgullo. “Fui a una competencia a Managua representado mi colegio y a Bilwi y recité un poema llamado La Fuente de Rubén Darío. Me gusta la poesía y desde ahí me pusieron de mejor alumno en la nueva escuela.”
Claribel cuenta que Isaí quería aprenderse una poesía de Rubén Darío que suelen ser bastante largas. Encontró una que no lo era tanto y en poco tiempo se la aprendió. “Todas las mañanas lo levantaba y ensayábamos, lo tenía en el teléfono y él lo leía y lo leía. Ganó el concurso a nivel municipal. “Si yo no gano no me llamo Isaí” decía. Finalmente consiguió el primer lugar en el nivel municipal y también fue el mejor al nivel departamental. Así llegó a Managua. “Ahí quedó el último lugar, pero el mismo decía que si no ganaba, iba a traer el regalo y su certificado de participación. “A la hora de la actividad le preguntaba si tenía miedo, y decía que no que estaba tranquilo. Lloró de emoción al final” añade Claribel.
Isaí cuenta que ha estado varias veces en Managua por las visitas al médico y que la ciudad le gusta. Pero también Bilwi le gusta “porque aquí tenemos diversiones, no nos aburrimos, se pueden hacer cosas.
Después de ir a la escuela voy donde mi mamá, donde mi abuelita, me gusta ver tele, jugar Nintendo”. Sobre su sus asignaturas favoritas habla de que le gusta lengua (español), no cabe duda sabiendo lo de declamar poesía. “Ahí aprendemos, exponemos, pintamos y hacemos de todo. Me gusta matemáticas también, mi mama me ha enseñado desde chiquito. No soy bueno en mískitu, lo entiendo todo pero para hablarlo no soy bueno. En casa hablamos en mískitu, pero yo poco” concluye.
“Antes de los talleres no tenía en mi mente que lograra tanto. Con esto de despertarle en interés, el tener que explicar porqué hace las cosas, para qué sirven, eso le cambió. El sí puede. Estoy convencida de que la metodología de psicoafectividad a través del arte funciona” comenta Claribel y agradece a FUNARTE porque “me ha ayudado como madre a desarrollar en Isaí talentos como el de declamar”.
Isaí lo tiene claro, “el proceso que vivió mi mamá me ha ayudado bastante, porque yo quería pintar, pero no había nadie que me enseñara. Mi mamá sabía dibujar, pero fue con el taller que aprendí. Quiero a mi mamá y quiero todo lo que ella hace, el tiempo que me dedica”.
Proyecto TransformARTE
TransformARTE es un proyecto del programa de educación de Save the Children llevado a cabo por la organización FUNARTE en la Región Autónoma de la Costa Caribe Norte y del Sur entre 2015 y 2018. El objetivo del proyecto es Fortalecer el currículo de la Educación Intercultural Bilingüe (EIB) integrando la Psicoafectividad a través del arte. El trabajo se ha desarrollado con autorización y coordinación de los Directores de las Secretarías de Educación y las delegaciones del MINED de ambas regiones, en las que se involucra directamente a niñas y niños de las escuelas modelos, asesores del MINED, personal técnico de las Secretarías Regionales de Educación, directoras, directores y docentes de las universidades, escuelas normales y escuelas primarias, además de a madres y padres.